La idea de que vivimos en un número prácticamente ilimitado de realidades casi idénticas no es nada nuevo.

En un universo, por ejemplo, usted puede haber muerto en un accidente automovilístico el mes pasado, mientras que en otro puede incluso haberse convertido en el Presidente de su país. Todo resultado concebible ha ocurrido en al menos uno de estos universos - cada versión de la historia se ha desarrollado en alguna parte.


En su reciente libro Something Deeply Hidden, el físico Sean Carroll del California Institute of Technology profundiza en este concepto con más detalle.

La idea de los universos paralelos, argumenta, es una posibilidad definitiva.

"Es absolutamente posible que haya varios mundos en los que se hayan tomado decisiones diferentes", dijo durante una entrevista reciente con la NBC. "Sólo estamos obedeciendo las leyes de la física."

"No sabemos si el número de mundos es finito o infinito, pero ciertamente es un número muy grande."

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Según la teoría, cada decisión que una persona toma puede dividir la realidad en dos nuevas iteraciones, cada una siguiendo un resultado posible diferente. Sobre esta base, argumenta Carroll, los universos paralelos pueden no estar situados en ningún lugar o momento en particular, sino que pueden existir en relación con el observador.

En el peculiar mundo de la mecánica cuántica, tal concepto no sería tan sorprendente.


"Antes de mirar un objeto, ya sea un electrón, un átomo o lo que sea, no está en un lugar definido", dijo Carrol. "Puede que sea más probable que lo observes en un lugar u otro, pero en realidad no está localizado en ningún lugar en particular."

Sin embargo, en cuanto a visitar estas realidades alternativas, Carroll sigue siendo escéptico.

"No interactúan, no se influyen entre sí de ninguna manera", dijo. "Cruzar es como viajar más rápido que la velocidad de la luz. No es algo que puedas hacer".

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